Peeling facial

El peeling facial es un tratamiento estético que utiliza productos químicos para renovar la piel. Existen diferentes tipos de peelings, desde superficiales hasta profundos, y se utilizan para tratar afecciones como el melasma, las efélides, el fotoenvejecimiento y el acné vulgar. 

El peeling facial es un tratamiento estético que utiliza productos químicos para renovar la piel. Existen diferentes tipos de peelings, desde superficiales hasta profundos, y se utilizan para tratar afecciones como el melasma, las efélides, el fotoenvejecimiento y el acné vulgar. Estos peelings pueden tener complicaciones, por lo que es importante la preparación adecuada de la piel y la responsabilidad ética de los profesionales que los realizan. Además, hay principios activos específicos, como la solución de jessner y los ácidos tricloroacético y pirúvico. Descubre todo sobre los peelings en este completo artículo.

Qué es?

¿Qué es un peeling?

El peeling es un tratamiento estético que consiste en la aplicación de productos químicos en la piel con el objetivo de exfoliar y renovar las capas superficiales. Mediante esta técnica, se busca mejorar la apariencia de la piel, eliminando manchas, arrugas, cicatrices y otros problemas cutáneos.

Este procedimiento se realiza en diferentes zonas del cuerpo, pero es más comúnmente utilizado en el rostro. Los peelings pueden ser superficiales, medios o profundos, dependiendo de la profundidad a la que actúen en la epidermis.

El peeling superficial es el más suave y solo actúa en la capa más externa de la piel. Es ideal para tratar manchas leves y suavizar arrugas finas. Por otro lado, el peeling medio actúa en capas más profundas de la piel, mejorando problemas como el fotoenvejecimiento y las cicatrices de acné. Finalmente, el peeling profundo es el más agresivo y puede llegar a la dermis, siendo eficaz en el tratamiento de arrugas profundas y marcas importantes.

Para realizar un peeling, se utilizan diversos principios activos, como los alfahidroxiácidos, el ácido tricloroacético y el fenol. Cada uno de ellos tiene diferentes características y objetivos, por lo que es importante seleccionar el producto adecuado según las necesidades de la piel.

Tipos de peelings químicos

Existen diferentes tipos de peelings químicos que se pueden utilizar para mejorar la apariencia de la piel y tratar diversas afecciones cutáneas. Estos se clasifican en tres categorías principales: peelings superficiales, peelings medios y peelings profundos.

Peelings superficiales

Los peelings superficiales son los más suaves de todos y se utilizan para tratar problemas de pigmentación, textura irregular de la piel y signos leves de envejecimiento. Generalmente, se aplican ácidos suaves como el ácido glicólico o el ácido salicílico en concentraciones bajas. Estos peelings no causan una descamación intensa de la piel y no requieren un tiempo de recuperación prolongado.

Los peelings superficiales pueden mejorar la luminosidad de la piel, reducir la apariencia de manchas oscuras y suavizar líneas finas y arrugas superficiales. Sin embargo, es posible que se necesiten múltiples tratamientos para obtener resultados óptimos.

Peelings medios

Los peelings medios son más intensos que los superficiales y se utilizan para tratar problemas cutáneos más graves, como arrugas más pronunciadas, manchas solares y textura de la piel desigual. Se aplican ácidos como el ácido tricloroacético (TCA) en concentraciones más altas y pueden causar una descamación moderada de la piel.

Estos peelings pueden mejorar el tono y la textura de la piel, reducir las manchas oscuras más profundas y suavizar arrugas más marcadas. El tiempo de recuperación suele ser de unos días y es posible que se necesite un tratamiento adicional para lograr resultados óptimos.

Peelings profundos

Los peelings profundos son los más agresivos y se utilizan para tratar problemas cutáneos graves, como cicatrices de acné profundas, arrugas profundas y daño solar significativo. Se utiliza ácido fenol en concentraciones altas y pueden causar una descamación intensa de la piel.

Estos peelings pueden mejorar drásticamente la apariencia de la piel, suavizando arrugas profundas, eliminando cicatrices pronunciadas y mejorando la textura general. Sin embargo, el tiempo de recuperación es más prolongado y el procedimiento debe ser realizado por un profesional experimentado.

Principios activos utilizados en los peelings

Los peelings químicos utilizan una variedad de principios activos para lograr los resultados deseados en la renovación de la piel. Estos principios activos están formulados en concentraciones específicas para tratar diferentes afecciones cutáneas de manera efectiva. A continuación, se presentan algunos de los principios activos más comunes utilizados en los peelings:

Ácidos Alfa Hidroxiácidos (AHA)

• El ácido glicólico es uno de los AHAs más utilizados en los peelings. Ayuda en la exfoliación de las capas superficiales de la piel, mejorando su textura y apariencia.
• El ácido láctico, derivado de la leche, también es efectivo en la renovación celular y la reducción de manchas.
• El ácido cítrico, presente en frutas cítricas como limones y naranjas, contribuye a la eliminación de células muertas y a la estimulación del colágeno.

Ácido Salicílico

El ácido salicílico es un beta hidroxiácido (BHA) que se utiliza principalmente en peelings para tratar el acné y las imperfecciones de la piel. Penetra en los poros, reduce la inflamación y ayuda a eliminar el exceso de grasa.

Ácido Retinoico

El ácido retinoico es un derivado de la vitamina A y se utiliza en peelings para el tratamiento del fotoenvejecimiento y la reducción de arrugas finas. Estimula la regeneración celular y promueve la producción de colágeno y elastina.

Ácido Kójico

El ácido kójico es un agente despigmentante utilizado en peelings para tratar el melasma y las manchas cutáneas. Inhibe la producción de melanina y ayuda a igualar el tono de la piel.

Ácido Tricloroacético (TCA)

El ácido tricloroacético es un agente químico utilizado en peelings medios y profundos. Penetra en capas más profundas de la piel, promoviendo la regeneración celular y mejorando la apariencia de arrugas, cicatrices y manchas.

Estos son solo algunos ejemplos de los principios activos utilizados en los peelings químicos. Cada uno de ellos tiene propiedades específicas y se utiliza en concentraciones adecuadas según las necesidades individuales del paciente y la profundidad del peeling requerido.

Indicaciones para el uso de peelings faciales

Los peelings faciales son una técnica utilizada para mejorar la apariencia y textura de la piel. Estos tratamientos pueden ser recomendados para tratar diferentes problemas cutáneos, como:

• Manchas y pigmentación irregular
• Apariencia opaca y falta de luminosidad
• Líneas finas y arrugas
• Cicatrices de acné
• Poros dilatados

Además, los peelings faciales pueden ser beneficiosos para quienes buscan una renovación general de la piel y una apariencia más fresca y rejuvenecida. Estos tratamientos pueden ser adaptados a diferentes tipos y tonos de piel, pero siempre es importante valorar cada caso de forma individual y contar con la recomendación de un profesional.

Complicaciones posibles en los peelings

El proceso de peeling facial, al ser un tratamiento químico que afecta la capa más superficial de la piel, puede presentar ciertas complicaciones en algunos casos. A continuación, se describen las complicaciones más comunes que pueden ocurrir durante o después de un peeling facial:

• Enrojecimiento excesivo: Después del tratamiento, es normal que la piel presente enrojecimiento leve, pero en algunos casos puede haber un enrojecimiento excesivo, que puede indicar una reacción adversa o una quemadura química. Es importante que el profesional esté atento a este tipo de reacción y tome las medidas necesarias para mitigarla.
• Irritación y sensibilidad: Al realizar un peeling, la piel puede volverse especialmente sensible e irritada. Esto puede manifestarse con picor, escozor o sensación de quemazón. Si estos síntomas persisten de manera intensa, es necesario evaluar la situación y tomar las medidas adecuadas para aliviar la irritación.
• Hiperpigmentación o hipopigmentación: En ocasiones, puede ocurrir un desequilibrio en la producción de melanina durante el proceso de cicatrización posterior al peeling. Esto puede manifestarse como un oscurecimiento excesivo de la piel (hiperpigmentación) o una disminución en la producción de melanina, resultando en manchas más claras en la piel (hipopigmentación). Estas alteraciones en la pigmentación pueden ser temporales o permanentes.
• Cicatrización anormal: En casos raros, el proceso de cicatrización después de un peeling puede resultar en cicatrices hipertróficas (elevadas) o incluso cicatrices queloides (crecimiento excesivo del tejido cicatricial). Es importante que el profesional esté preparado para evaluar y tratar estas complicaciones si se presentan.
• Infecciones: Aunque es poco común, existe la posibilidad de que ocurra una infección en el área tratada. Es esencial seguir las recomendaciones de higiene y cuidado posterior al peeling para reducir el riesgo de infección. Si se sospecha de una infección, se debe buscar atención médica de inmediato.

Es fundamental que los profesionales que realicen peelings estén debidamente capacitados para identificar y manejar cualquier complicación que pueda surgir durante el proceso. Además, es importante brindar al paciente una información completa sobre las posibles complicaciones y los cuidados posteriores necesarios para minimizar los riesgos y garantizar una adecuada recuperación.

Preparación de la piel antes del tratamiento de peeling facial

Antes de someterse a un tratamiento de peeling facial, es esencial realizar una correcta preparación de la piel. Estos son los pasos a seguir:

• Limpieza profunda: Se debe realizar una limpieza facial exhaustiva para eliminar cualquier rastro de maquillaje, suciedad y grasa acumulada en la piel. Se recomienda utilizar un limpiador suave y específico para el tipo de piel.
• Evaluación médica: Es importante consultar a un dermatólogo o esteticista antes de someterse a un peeling facial. El especialista evaluará la condición de la piel, determinará el tipo de peeling adecuado y descartará cualquier contraindicación.
• Protección solar: Durante al menos dos semanas antes del tratamiento, se debe evitar la exposición directa al sol y utilizar un protector solar de amplio espectro con un factor de protección alto. Esto ayudará a proteger la piel y evitar posibles complicaciones.
• Abstinencia de ciertos medicamentos y productos: Algunos medicamentos y productos tópicos pueden aumentar la sensibilidad de la piel y afectar los resultados del peeling facial. Es importante seguir las indicaciones del especialista y suspender temporalmente el uso de ciertos productos, como retinoides o productos exfoliantes.
• Hidratación adecuada: Mantener la piel hidratada es fundamental para prepararla antes del tratamiento de peeling facial. Se recomienda utilizar una crema hidratante adecuada para el tipo de piel y aplicarla regularmente.
• No depilar ni realizar tratamientos agresivos: Se debe evitar depilar la piel con cera caliente o someterse a otros tratamientos agresivos en el área a tratar al menos dos semanas previas al peeling facial. Esto ayudará a evitar irritaciones y posibles complicaciones.

Una vez que se haya seguido adecuadamente estos pasos de preparación, la piel estará lista para recibir el tratamiento de peeling facial, y se maximizarán los resultados obtenidos.

Responsabilidades éticas de los profesionales en el peeling

Uso de peelings en afecciones dermatológicas

Melasma

El melasma es una condición cutánea caracterizada por la aparición de manchas oscuras en la piel, especialmente en el rostro. Los peelings químicos superficiales y medios han demostrado ser efectivos en el tratamiento de esta afección. Estos peelings favorecen la exfoliación y renovación de la piel, eliminando gradualmente las manchas y mejorando la apariencia general del melasma.

Efélides

Las efélides, también conocidas como pecas, son pequeñas manchas de color marrón claro que aparecen principalmente en áreas expuestas al sol. Los peelings químicos superficiales son una opción efectiva para tratar las efélides, ya que ayudan a eliminar las capas superiores de la piel y reducir la apariencia de las pecas. Es importante tener en cuenta que las efélides suelen reaparecer con la exposición solar, por lo que es necesario utilizar medidas de protección solar adecuadas.

Fotoenvejecimiento

El fotoenvejecimiento es un proceso provocado por la exposición prolongada y repetida al sol, que resulta en la aparición de arrugas, manchas, y una textura de piel áspera. Los peelings químicos medios y profundos son ampliamente utilizados en el tratamiento del fotoenvejecimiento, ya que promueven la regeneración celular y estimulan la producción de colágeno, mejorando la apariencia general de la piel y reduciendo los signos del envejecimiento.

Acné vulgar

El acné vulgar es una afección cutánea común caracterizada por la aparición de espinillas, puntos negros y/o quistes. Los peelings químicos superficiales y medios son una opción eficaz para el tratamiento del acné vulgar, ya que ayudan a exfoliar la piel y reducir la obstrucción de los poros, disminuyendo así la aparición de nuevas lesiones y mejorando la textura de la piel. Es importante destacar que el tratamiento del acné vulgar puede requerir sesiones de peelings químicos periódicas para obtener resultados óptimos.

• Los peelings químicos son una opción de tratamiento efectiva para diversas afecciones dermatológicas, incluyendo el melasma, efélides, fotoenvejecimiento y acné vulgar.
• Los peelings superficiales y medios son utilizados en el tratamiento del melasma, eliminando gradualmente las manchas oscuras en la piel.
• Las efélides pueden ser tratadas con peelings superficiales, reduciendo la apariencia de las pecas.
• El fotoenvejecimiento puede ser abordado con peelings medios y profundos, estimulando la regeneración celular y la producción de colágeno.
• Para el acné vulgar, los peelings químicos superficiales y medios son efectivos en la reducción de las lesiones y mejora de la textura de la piel.
• Es importante seguir las recomendaciones del profesional y utilizar medidas de protección solar para mantener los resultados obtenidos con los peelings químicos.

Características específicas de algunos peelings

La solución de jessner es un tipo de peeling químico que combina ácido salicílico, ácido láctico y resorcinol. Este peel utiliza una solución líquida que se aplica en la piel para exfoliar y eliminar las capas superiores dañadas. La solución de jessner es especialmente efectiva para tratar el acné, las manchas pigmentadas y las arrugas finas.

Peelings con alfahidroxiácidos

Los peelings con alfahidroxiácidos (AHA) son procedimientos químicos que utilizan ácidos como el ácido glicólico, el ácido láctico y el ácido mandélico para exfoliar la piel. Estos ácidos suaves eliminan las células muertas y estimulan la formación de colágeno, mejorando la textura y apariencia de la piel. Los peelings con AHA son ideales para tratar el fotoenvejecimiento, las líneas finas y las manchas.

Ácido pirúvico

El ácido pirúvico es un ácido orgánico que se utiliza en los peelings para tratar problemas como el acné, las marcas de acné y el fotoenvejecimiento. Este peeling actúa en las capas superficiales y medias de la piel, estimulando la producción de colágeno y elastina. Además, ayuda a reducir la apariencia de arrugas y manchas, dejando la piel más luminosa y rejuvenecida.

Fenol

El peeling con fenol es un tratamiento más profundo que se utiliza para tratar arrugas y manchas severas. Este tipo de peeling químico trabaja en las capas más profundas de la piel, eliminando las células dañadas y estimulando la regeneración celular. El fenol ofrece resultados duraderos y significativos, pero requiere un tiempo de recuperación más prolongado.

Ácido tricloroacético

El ácido tricloroacético (TCA) es uno de los peelings más utilizados debido a su versatilidad y efectividad. Este peeling puede ser utilizado en diferentes concentraciones, lo que permite ajustar el tratamiento según las necesidades de cada paciente. El TCA se utiliza para tratar manchas, arrugas finas, cicatrices de acné y otras imperfecciones cutáneas. Además, estimula la producción de colágeno para mejorar la apariencia general de la piel.